lunes, 6 de febrero de 2017

prosecion

     Realmente emocionante todo...
La unión, el respeto, la dedicación que mostraron todos y todas los practicantes y feligreses, sin banderas partidarias ni personalismos, un pueblo unido en amor a sus creencias, en amor a la Reyna del Mar, Nuestra Gran Madre Universal Yemanja... espero de corazón este sea un paso hacia una unificación sin individualismo.
Feliz de haber participado y compartir algo tan bello!!!
Gracias Baba Hugo de Iemanja...
Gracias Mae Yemanja...
Omi odo iyanla Yemoja Gbe wa o!!!
Odoiyaaaa... Mo dupe!!!
Asè o!!! Axè!!!                                                                               

prosecion


ofrendas


OFRENDAS


AGRADECIMIENTO

En mi nombre y en el nombre de Reino de Iemanjá Bomí, agradezco a todas las autoridades y fieles que, a pesar de la inclemencia del tiempo, nos acompañaron hoy, en esta bella ciudad de Mar del Plata en el 33° Aniversario de la Ceremonia a la Mae Iemanjá. Hago extensivo este agradecimiento al Sr. Sub Secreatario de Cultura, Arq. Marcelo de la Plaza que participó de toda la celebración. Al Sr. Javier Moreno Iglesias y la gente de AMADI con su bellísima bandera por la Diversidad. Al antropólogo Alejandro FrigerioDario La Vega, a los investigadores de la UBA y de la Universidad de Quilmes, a nuestra amiga y asesora cultural Virginia Ceratto Baños, a Marta Abachian, Edith Menéndez, al joven periodista Ezequiel que estuvo desde los momentos de la organización. A la Mae Iya Peggie Odumola Sowunmi. Al equipo de guardavidas, la custodia policial. Y sobre todo, a las personas que, con su fe o su inquietud cultural, se hicieron presentes. Fue difícil tomar esta decisión de llevar a cabo la Ceremonia, y lo hicimos luego de deliberaciones y de consultar, hasta las 18:30 con servicios autorizados en cuanto a la inclemencia del tiempo. Como nos aseguraron que había cesado momentáneamente el alerta, llevamos a cabo la Fiesta y nuestro Homenaje a la Mae Iemanjá teniendo el cuidado de acotar la Celebración, para que nadie saliera perjudicado y todos pudieran volver a sus hogares o al centro donde se alojó la gente que vino desde muchos lugares, a salvo.
Estamos muy conmovidos y agradecidos por la presencia de todos.
Mar del Plata, una vez más, ha sido escenario de una comunión de respeto por la Espiritualidad y la Cultura.
Que Dios y la Mae Iemanjá los bendiga. Ashé.

fiesta ha honor IEMANJA

A pesar del clima y un mar embravecido, la comunidad africanista, fiel a sus preceptos, realizó la trigésimo tercera Ceremonia en Honor a Iemanjá en Mar del Plata.
Como se había previsto en la reunión organizativa realizada el sábado, y para preservar la integridad física de las personas, la Ceremonia consistió en la procesión, entrega de las barcas con ofrendas al mar, la bendición de las aguas y fuegos artificiales que iluminaron de manera impactante la playa.
En el momento de la apertura, y con sentidas y conmovedoras palabras, el babá Hugo Watenberg, organizador de la Ceremonia y director del Centro de Estudios Africanistas Reino de Iemanjá Bomí (CABA), agradeció la presencia de todos los que año tras año siguen y se suman a la Ceremonia, y explicó no sólo el fundamento de esta Celebración sino y particularmente en esta oportunidad, la prevención por los presentes, ante la inminencia de un nuevo temporal que, durante todo el transcurso de la misma se mostró amenazante pero no se presentó.
Asistió también el sub secretario de Cultura, Arq. Marcelo de la Plaza; el presidente de AMADI –Asociación Marplatense por el Derecho a la Diversidad, Javier Andrés Moreno Iglesias; el antropólogo Alejandro Frigerio -investigador del Conicet-;  el cineasta Darío La Vega, director del documental Iemanjá Nuestra Madre, rodado en CABA y Mar del Plata; investigadores antropólogos de las Universidades de Buenos Aires y Quilmes y destacados religiosos de nuestro país y de Cuba, Brasil, Uruguay y Paraguay. También se sumó Estela Carrizo, directora de la Red de Personas viviendo con VIH.
Como dato singular, en el momento de la entrega de barcas y bendición de las aguas, la marea subió de manera espontánea y sostenida, llevando todas las ofrendas consigo. “Creer o creer” era el comentario común entre los asistentes.
Al finalizar, personal de la organización recogió, como siempre, todo lo que el mar devolvió a la orilla, dejando la playa sin ningún residuo.
Cabe recordar que la Fiesta cuenta con las declaraciones de Interés Cultural de General Pueyrredon y Turístico del Emtur y de Provincial y de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia, además del aval de la Defensoría del Pueblo.
Iemanjá es la orixá protectora de la familia y en especial de los hombres de mar en el culto africano y su culto llegó de África, en los llamados barcos negreros, en el corazón de los esclavos y prontamente se extendió por toda América, fusionándose incluso, con cultos vernáculos, como el de los caboclos.
En cuanto a los orígenes de este homenaje, se remontan a siglos pasados, cuando los barcos llamados negreros traían a los esclavos desde España y Portugal a América del Sur -ingleses, daneses, alemanes y holandeses lo hacían en América del Norte- y estos hombres sometidos rendían homenaje a sus orixás africanos en los medios naturales de cada uno, por ejemplo el mar. De ahí viene el sincretismo con la religión católica, y así Iemanjá se asimila a Stella Maris, Oxum a Nuestra Señora de la Concepción, Ogum a San Jorge, Xangó a San Marcos de León, dado que para sobrevivir, los esclavos debían culto a estos santos para no ser torturados. Lo mismo ocurría con los naturales de América, los pueblos originarios, que rendían culto a la Pachamama a través del Ojo de Maíz formado como una cruz. Como fieles, no requieren, en modo alguno, que las personas que asisten sean de esa religión, porque aceptan todos los credos y porque la Ceremonia ya es un acontecimiento cultural y turístico.

La lluvia y el viento no detuvieron a Iemanjá

A pesar del clima y un mar embravecido, la comunidad africanista, fiel a sus preceptos, realizó la trigésimo tercera Ceremonia en Honor a Iemanjá en Mar del Plata.
Como se había previsto en la reunión organizativa realizada el sábado, y para preservar la integridad física de las personas, la Ceremonia consistió en la procesión, entrega de las barcas con ofrendas al mar, la bendición de las aguas y fuegos artificiales que iluminaron de manera impactante la playa.
En el momento de la apertura, y con sentidas y conmovedoras palabras, el babá Hugo Watenberg, organizador de la Ceremonia y director del Centro de Estudios Africanistas Reino de Iemanjá Bomí (CABA), agradeció la presencia de todos los que año tras año siguen y se suman a la Ceremonia, y explicó no sólo el fundamento de esta Celebración sino y particularmente en esta oportunidad, la prevención por los presentes, ante la inminencia de un nuevo temporal que, durante todo el transcurso de la misma se mostró amenazante pero no se presentó.
Asistió también el sub secretario de Cultura, Arq. Marcelo de la Plaza; el presidente de AMADI –Asociación Marplatense por el Derecho a la Diversidad, Javier Andrés Moreno Iglesias; el antropólogo Alejandro Frigerio -investigador del Conicet-;  el cineasta Darío La Vega, director del documental Iemanjá Nuestra Madre, rodado en CABA y Mar del Plata; investigadores antropólogos de las Universidades de Buenos Aires y Quilmes y destacados religiosos de nuestro país y de Cuba, Brasil, Uruguay y Paraguay. También se sumó Estela Carrizo, directora de la Red de Personas viviendo con VIH.
Como dato singular, en el momento de la entrega de barcas y bendición de las aguas, la marea subió de manera espontánea y sostenida, llevando todas las ofrendas consigo. “Creer o creer” era el comentario común entre los asistentes.
Al finalizar, personal de la organización recogió, como siempre, todo lo que el mar devolvió a la orilla, dejando la playa sin ningún residuo.
Cabe recordar que la Fiesta cuenta con las declaraciones de Interés Cultural de General Pueyrredon y Turístico del Emtur y de Provincial y de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia, además del aval de la Defensoría del Pueblo.
Iemanjá es la orixá protectora de la familia y en especial de los hombres de mar en el culto africano y su culto llegó de África, en los llamados barcos negreros, en el corazón de los esclavos y prontamente se extendió por toda América, fusionándose incluso, con cultos vernáculos, como el de los caboclos.
En cuanto a los orígenes de este homenaje, se remontan a siglos pasados, cuando los barcos llamados negreros traían a los esclavos desde España y Portugal a América del Sur -ingleses, daneses, alemanes y holandeses lo hacían en América del Norte- y estos hombres sometidos rendían homenaje a sus orixás africanos en los medios naturales de cada uno, por ejemplo el mar. De ahí viene el sincretismo con la religión católica, y así Iemanjá se asimila a Stella Maris, Oxum a Nuestra Señora de la Concepción, Ogum a San Jorge, Xangó a San Marcos de León, dado que para sobrevivir, los esclavos debían culto a estos santos para no ser torturados. Lo mismo ocurría con los naturales de América, los pueblos originarios, que rendían culto a la Pachamama a través del Ojo de Maíz formado como una cruz. Como fieles, no requieren, en modo alguno, que las personas que asisten sean de esa religión, porque aceptan todos los credos y porque la Ceremonia ya es un acontecimiento cultural y turístico.